Berliner Boersenzeitung - Con el corazón roto, muchos judíos se resignan a abandonar Odesa

EUR -
AED 4.325629
AFN 81.077607
ALL 97.693511
AMD 450.125122
ANG 2.107984
AOA 1080.081229
ARS 1482.295779
AUD 1.780778
AWG 2.123061
AZN 2.005254
BAM 1.957674
BBD 2.369999
BDT 143.076952
BGN 1.956897
BHD 0.443974
BIF 3498.307941
BMD 1.177842
BND 1.499648
BOB 8.110798
BRL 6.498389
BSD 1.173723
BTN 101.413641
BWP 15.664994
BYN 3.841389
BYR 23085.71137
BZD 2.357787
CAD 1.602449
CDF 3399.253219
CHF 0.932556
CLF 0.02848
CLP 1117.253838
CNY 8.43283
CNH 8.41973
COP 4756.186571
CRC 592.967582
CUC 1.177842
CUP 31.212824
CVE 110.369239
CZK 24.582219
DJF 208.799861
DKK 7.463519
DOP 71.048006
DZD 152.682591
EGP 57.822879
ERN 17.667636
ETB 160.375209
FJD 2.631536
FKP 0.871252
GBP 0.867233
GEL 3.192034
GGP 0.871252
GHS 12.265584
GIP 0.871252
GMD 84.80412
GNF 10183.747763
GTQ 9.008585
GYD 245.432842
HKD 9.245079
HNL 30.734419
HRK 7.534778
HTG 154.016115
HUF 398.568913
IDR 19169.26755
ILS 3.929771
IMP 0.871252
INR 101.668959
IQD 1537.571746
IRR 49601.891496
ISK 142.200568
JEP 0.871252
JMD 188.28022
JOD 0.835117
JPY 171.978536
KES 151.588655
KGS 102.911748
KHR 4704.463115
KMF 495.279708
KPW 1060.119461
KRW 1612.101392
KWD 0.359313
KYD 0.978128
KZT 631.679273
LAK 25302.218985
LBP 105171.472847
LKR 354.108949
LRD 235.33426
LSL 20.611429
LTL 3.477863
LVL 0.712465
LYD 6.347075
MAD 10.555849
MDL 19.847998
MGA 5184.962985
MKD 61.619243
MMK 2472.409912
MNT 4224.185072
MOP 9.489583
MRU 46.585591
MUR 53.414953
MVR 18.142985
MWK 2035.248115
MXN 21.834454
MYR 4.971086
MZN 75.334505
NAD 20.611254
NGN 1793.877325
NIO 43.191342
NOK 11.897351
NPR 162.262316
NZD 1.945384
OMR 0.452876
PAB 1.173728
PEN 4.183705
PGK 4.933723
PHP 66.690025
PKR 334.159053
PLN 4.252424
PYG 8791.90069
QAR 4.278941
RON 5.069548
RSD 117.129321
RUB 92.342865
RWF 1696.623988
SAR 4.418897
SBD 9.758536
SCR 16.979453
SDG 707.292535
SEK 11.190486
SGD 1.502049
SHP 0.925599
SLE 27.031864
SLL 24698.771209
SOS 670.742026
SRD 42.928827
STD 24378.959974
STN 24.523474
SVC 10.26983
SYP 15314.260384
SZL 20.60172
THB 37.851734
TJS 11.261832
TMT 4.134227
TND 3.426536
TOP 2.758623
TRY 47.649586
TTD 7.965557
TWD 34.485457
TZS 3068.279255
UAH 49.079378
UGX 4213.997812
USD 1.177842
UYU 47.184965
UZS 14911.272894
VES 141.66311
VND 30789.978619
VUV 141.412703
WST 3.104897
XAF 656.585476
XAG 0.030176
XAU 0.000349
XCD 3.183178
XCG 2.115325
XDR 0.816582
XOF 656.585476
XPF 119.331742
YER 283.801276
ZAR 20.655473
ZMK 10601.994869
ZMW 27.261599
ZWL 379.264778
Con el corazón roto, muchos judíos se resignan a abandonar Odesa
Con el corazón roto, muchos judíos se resignan a abandonar Odesa

Con el corazón roto, muchos judíos se resignan a abandonar Odesa

Obligados a volver al exilio, como tantas veces en su agitada historia, decenas de judíos abandonan cada día su querida Odesa, la ciudad del mar Negro impregnada de cultura e historia judías, lamentando la "desintegración" de su comunidad.

Tamaño del texto:

Todos los días, al amanecer, se reúnen frente a la estación y suben a los autobuses que se dirigen a Moldavia o Rumanía. Algunos irán hasta Alemania, a Estados Unidos y muchos a Israel.

Entre ellos hay muchas personas mayores. Son la memoria de la historia judía en Ucrania y saben que no volverán.

Algunos ya han vivido el exilio, como Galina Dimievitch, de 87 años, "una niña de la guerra" que huyó de los nazis con sus padres en 1942, y que ahora regresará a Israel para reunirse con uno de sus hijos.

Su marido murió el 24 de febrero, el día de la invasión rusa de Ucrania. "Doy gracias a Dios por no haber visto esto", suspira esta mujer que fue ingeniera. La víspera de su partida se instaló en un pequeño y destartalado hotel de Odesa, donde se reúnen los judíos que se van.

"Hoy tengo que dejar la tierra de mi marido y de mis padres, dejar atrás sus tumbas", añade la anciana, originaria de Mykolayiv, una ciudad bajo el fuego ruso 100 kilómetros más al este.

"Recuerdo que mi madre me contaba cómo tuvieron que huir de los nazis. Supongo que ahora me siento igual que ella", dijo Clara, de 72 años, que el jueves está en la lista de evacuación.

- "Desintegración" -

Odesa, la principal ciudad portuaria ucraniana, fundada por la emperatriz rusa Catalina II, albergó una gran comunidad judía hasta la década de 1940, cuando fue diezmada por las masacres y las deportaciones.

Antes de la invasión rusa aún vivían en esta ciudad de un millón de habitantes unos 40.000 judíos, según estimaciones del rabino Avraham Wolff, líder en Odesa de la comunidad ultraortodoxa Jabad.

Desde el comienzo de la guerra, alrededor del 20% ya se ha marchado, dijo el rabino a la AFP desde Alemania, donde acudió unos días para supervisar las evacuaciones.

"Este es uno de los momentos más difíciles de mi vida, ver esta desintegración de la comunidad judía. Y ocurre en un momento en que empezaba a desarrollarse de nuevo, con guarderías, escuelas, orfanatos, una universidad", dice.

"El dolor es muy grande, pero ahora lo único que importa es sacar a los judíos de Ucrania y salvarlos", añade. Varias asociaciones comunitarias están trabajando para reunir a los que quieren irse y organizar las evacuaciones.

- "Legado judío" -

La centenaria sinagoga Jabad de Odesa, cerrada durante el periodo soviético, solía acoger hasta 150 fieles al día antes de la guerra. Ahora solo vienen dos o tres personas a rezar, "por Ucrania".

Olexsander Klimanov, de 64 años, un jubilado que lleva una gorra gris, es uno de ellos. Su familia fue evacuada, pero él se quedará.

"Toda mi vida está en Odesa, soy viejo, no puedo adaptarme como los jóvenes, aprender un nuevo idioma", asegura. "No es la primera vez que vemos a los judíos emprender el camino del exilio", explica, recordando la discriminación y la emigración masiva de los judíos en tiempos de la URSS.

Pero marcharse significa abandonar una historia, unas raíces y un patrimonio judíos que hacen que esta ciudad y su región sean únicas para la comunidad.

Aquí nacieron o vivieron importantes personajes, como el poeta Haim Byalik o el padre de la derecha nacionalista israelí, Vladimir Jabotinsky. La ciudad tiene un enorme cementerio judío.

"Tenemos que preservar el legado", dice Anna Bartaret, una madre a punto de ser evacuada con sus dos hijas pequeñas, de ocho y diez años, muy implicada en la comunidad judía de Mykolayiv.

"Putin es un enfermo", asegura esta directora de marketing, que no quiere ser evacuada más allá de Moldavia, para poder "volver andando a Ucrania cuando todo acabe".

(T.Renner--BBZ)