Berliner Boersenzeitung - La guerra en Ucrania golpea la cooperación científica con Rusia

EUR -
AED 4.293926
AFN 80.664061
ALL 97.673606
AMD 448.805894
ANG 2.092137
AOA 1072.008381
ARS 1473.86814
AUD 1.777194
AWG 2.107191
AZN 1.992006
BAM 1.954969
BBD 2.359897
BDT 142.119594
BGN 1.956648
BHD 0.440707
BIF 3438.141097
BMD 1.169038
BND 1.495564
BOB 8.093595
BRL 6.502078
BSD 1.168803
BTN 100.195413
BWP 15.604368
BYN 3.824874
BYR 22913.14706
BZD 2.347702
CAD 1.601524
CDF 3373.844424
CHF 0.930865
CLF 0.029161
CLP 1119.038818
CNY 8.380309
CNH 8.386416
COP 4674.983423
CRC 589.449462
CUC 1.169038
CUP 30.97951
CVE 110.795635
CZK 24.665189
DJF 207.761914
DKK 7.461795
DOP 70.497539
DZD 151.705573
EGP 57.855667
ERN 17.535572
ETB 160.045846
FJD 2.621276
FKP 0.861628
GBP 0.866082
GEL 3.16855
GGP 0.861628
GHS 12.162504
GIP 0.861628
GMD 83.590727
GNF 10119.194341
GTQ 8.978184
GYD 244.526067
HKD 9.176307
HNL 30.804608
HRK 7.533988
HTG 153.404797
HUF 399.5543
IDR 18972.787189
ILS 3.894218
IMP 0.861628
INR 100.328609
IQD 1531.439931
IRR 49231.122092
ISK 142.400984
JEP 0.861628
JMD 186.90056
JOD 0.828894
JPY 172.334969
KES 151.39488
KGS 102.232832
KHR 4700.702671
KMF 492.340851
KPW 1052.173978
KRW 1612.291055
KWD 0.357481
KYD 0.973978
KZT 610.670442
LAK 25169.39103
LBP 104721.265739
LKR 351.480608
LRD 234.977068
LSL 20.949609
LTL 3.451866
LVL 0.70714
LYD 6.307006
MAD 10.52427
MDL 19.78759
MGA 5178.839256
MKD 61.56729
MMK 2453.70284
MNT 4194.046924
MOP 9.450302
MRU 46.415189
MUR 53.168296
MVR 18.007558
MWK 2030.039055
MXN 21.79146
MYR 4.971339
MZN 74.772119
NAD 20.949604
NGN 1786.89858
NIO 42.962591
NOK 11.839321
NPR 160.312861
NZD 1.945479
OMR 0.449493
PAB 1.168808
PEN 4.145998
PGK 4.822327
PHP 66.037214
PKR 332.445259
PLN 4.266015
PYG 9058.149949
QAR 4.256005
RON 5.081579
RSD 117.102724
RUB 91.189371
RWF 1676.400657
SAR 4.384424
SBD 9.733981
SCR 16.480784
SDG 702.011685
SEK 11.176827
SGD 1.496958
SHP 0.91868
SLE 26.307644
SLL 24514.149043
SOS 668.109564
SRD 43.49699
STD 24196.728708
SVC 10.226653
SYP 15199.779355
SZL 20.949595
THB 37.935718
TJS 11.296147
TMT 4.103324
TND 3.393762
TOP 2.738009
TRY 46.955356
TTD 7.940625
TWD 34.1849
TZS 3039.499492
UAH 48.831645
UGX 4189.219426
USD 1.169038
UYU 47.259913
UZS 14794.17774
VES 133.584256
VND 30528.845862
VUV 140.012408
WST 3.21431
XAF 655.672706
XAG 0.030416
XAU 0.000348
XCD 3.159384
XDR 0.812965
XOF 655.250067
XPF 119.331742
YER 282.732293
ZAR 20.963079
ZMK 10522.750076
ZMW 27.056616
ZWL 376.429796
La guerra en Ucrania golpea la cooperación científica con Rusia
La guerra en Ucrania golpea la cooperación científica con Rusia

La guerra en Ucrania golpea la cooperación científica con Rusia

Hace un mes "todo se desmoronó" para Boris, investigador de neurociencia en París. Al igual que miles de sus compañeros, vio cómo sus proyectos de investigación se derrumbaron después de que se suspendiera la cooperación con Rusia por su invasión de Ucrania.

Tamaño del texto:

En los días siguientes a la invasión, varias instituciones científicas de renombre mundial suspendieron su cooperación con Rusia.

Entre ellos, la Agencia Espacial Europea (ESA), el CNRS (el mayor organismo de investigación francés), el CERN (organismo europeo para la investigación nuclear) o incluso el MIT (prestigioso instituto estadounidense).

La decisión de cortar los vínculos atestó un duro golpe a la diplomacia científica, sobre todo en el sector aeroespacial, donde las potencias occidentales habían forjado estrechos lazos con Rusia desde el final de la Guerra Fría.

"La decisión fue dolorosa", dijo la semana pasada Josef Aschbacher, director de la ESA, cuyos 22 Estados miembros acababan de acordar la ruptura con sus homólogos rusos de Roscosmos.

- Ciencia sin fronteras -

Una de las primeras víctimas de la suspensión de cooperaciones con Rusia fue la misión ExoMars, que debía despegar este mismo año desde el cosmódromo de Baikonur, en Kazajistán, con ayuda de una lanzadera y una estructura de aterrizaje rusas.

Un hecho amargo para miles de científicos europeos y rusos que llevaban años trabajando en el proyecto, clave para buscar vida extraterrestre.

La suspensión de la misión también fue un golpe para una comunidad global abierta, impulsada por un ideal de ciencia sin fronteras y que acababa de recuperarse de la pandemia del covid-19.

En esa misma línea, Boris, investigador del Instituto Nacional de Investigación en Salud y Medicina de Francia, fundó un centro de ciencia cognitiva en Moscú.

Sus estudiantes viajaban por diferentes laboratorios de Europa, y él, que prefiere no dar su apellido, fue a Rusia para dar conferencias.

"Fue un modelo transfronterizo único en el campo de la neurociencia", explica a la AFP este estadounidense de origen soviético de unos 50 años que vive en Francia.

- "La guerra nos supera" -

De la noche a la mañana, se perdieron diez años de trabajo. Oficialmente, el proyecto no se ha detenido, pero en los hechos, "todo está bloqueado".

Debido a las sanciones, los investigadores ya no pueden financiar su trabajo en Rusia. Otros están amenazados por haber protestado en contra de la guerra o huyeron a Armenia y Turquía.

"Nos hablamos todos los días a través de Skype o de Zoom...pero estamos perdidos, la guerra nos supera", confiesa Boris, desolado.

Del lado ruso, el aislamiento hace temer que el país salga perdiendo en la competencia científica mundial. A principios de marzo, 7.000 científicos que trabajan en Rusia firmaron una petición contra la guerra.

Poco antes, la comunidad matemática había decidido que su principal congreso mundial no iba a celebrarse en San Petersburgo, como estaba previsto.

Carole Sigman, del CNRS, señala también que la influyente Academia de Ciencias de Rusia "pidió el cese de las hostilidades y se dirigió a los investigadores extranjeros para evitar la ruptura de las relaciones científicas".

La investigadora francesa destaca el auge de las demandas de visados de científicos sociales rusos para venir a Francia.

- "No abandonarlos" -

Del lado occidental, profesores de universidades conocidas como Harvard y Cambridge instaron a "no abandonar" a sus colegas rusos en un artículo publicado en la revista Science el jueves.

Según ellos, una "persecución indiscriminada" sería "un grave retroceso para los valores occidentales, basados en el progreso científico y tecnológico".

Al contrario, varios investigadores ucranianos, como el físico Maksym Strikha, de la Universidad Taras-Shevchenko de Kiev, piden un "boicot total" a la comunidad académica rusa.

Pero a pesar de ello, los vínculos persisten. "El muro sigue siendo permeable", observa Denis Guthleben, agregado científico del comité de historia del CNRS.

Este organismo público suspendió sus nuevas colaboraciones con Moscú, pero mantiene la actividad de sus laboratorios internacionales en territorio ruso.

(Y.Yildiz--BBZ)