Trump transforma la gala de los "Kennedy Honors" con su visión política
Donald Trump, quien promueve un enfoque nacionalista y conservador de la cultura en Estados Unidos, se convirtió el domingo en maestro de ceremonias de una gala en el Kennedy Center, un gran escenario de espectáculos en Washington.
En el evento se rinde homenaje a los galardonados con los "Kennedy Honors", unos premios otorgados cada año a un reducido grupo de artistas con una carrera prestigiosa.
"Cada uno de ellos tiene una historia de éxito y de triunfo que solo podría haber ocurrido en Estados Unidos", elogió Trump al hablar de los galardonados de 2025, entre los que se encuentran la superestrella del cine Sylvester Stallone y la cantante Gloria Gaynor.
Los predecesores del republicano se limitaban a asistir a la velada y veían el evento desde el palco presidencial.
Pero Donald Trump, expresentador de reality shows, quiso subir al escenario de esta sala cuya organización y dirección ha transformado para prohibir lo que él llama "propaganda antiamericana".
"Es la noche más hermosa en la historia del Kennedy Center", aseguró Trump, de 79 años, vestido de esmoquin.
El Kennedy Center, un gran edificio blanco con una imponente arquitectura de los años 70, situado a orillas del río Potomac, tenía una tradición de neutralidad política y ofrecía desde hace más de medio siglo una programación cultural diversa.
Y aunque durante su primer mandato (2017-2021) evitó este tipo de veladas cuando varios artistas dijeron que preferían no encontrarse con él, nada de eso ocurrió esta vez.
Mientras que en años anteriores los laureados recibían un collar con los colores del arcoíris, considerado "vulgar" por la administración Trump, los artistas recibieron esta vez una medalla dorada ofrecida por el joyero Tiffany, propiedad del grupo francés LVMH.
La nueva dirección del Kennedy Center, formada por fieles del presidente, ha eliminado los eventos que celebraban la comunidad LGBT.
Ahora ha invitado a conferencias de la derecha religiosa y a artistas cristianos.
Según la prensa estadounidense, las ventas de entradas han disminuido desde que Trump y sus allegados tomaron el control del Kennedy Center.
(Y.Yildiz--BBZ)