Berliner Boersenzeitung - París afronta el dilema del aire acondicionado contra el calor

EUR -
AED 4.314099
AFN 76.936429
ALL 96.605599
AMD 448.400944
ANG 2.102883
AOA 1077.044807
ARS 1691.556453
AUD 1.764619
AWG 2.114155
AZN 2.001365
BAM 1.959379
BBD 2.366212
BDT 143.572249
BGN 1.956545
BHD 0.440843
BIF 3482.482632
BMD 1.17453
BND 1.517265
BOB 8.117793
BRL 6.365607
BSD 1.174841
BTN 106.244614
BWP 15.566367
BYN 3.463412
BYR 23020.795811
BZD 2.362806
CAD 1.618562
CDF 2630.948518
CHF 0.934916
CLF 0.027253
CLP 1069.11676
CNY 8.28573
CNH 8.284609
COP 4467.326371
CRC 587.670939
CUC 1.17453
CUP 31.125056
CVE 110.728901
CZK 24.276491
DJF 208.738004
DKK 7.472132
DOP 74.994227
DZD 152.329593
EGP 55.571073
ERN 17.617956
ETB 182.316528
FJD 2.660605
FKP 0.879936
GBP 0.878351
GEL 3.175767
GGP 0.879936
GHS 13.489529
GIP 0.879936
GMD 85.741137
GNF 10207.844111
GTQ 8.998437
GYD 245.78791
HKD 9.137671
HNL 30.777205
HRK 7.537789
HTG 153.990624
HUF 385.234681
IDR 19536.845016
ILS 3.785271
IMP 0.879936
INR 106.356551
IQD 1538.634822
IRR 49474.161194
ISK 148.465122
JEP 0.879936
JMD 188.10359
JOD 0.832789
JPY 182.940203
KES 151.401433
KGS 102.713135
KHR 4705.169188
KMF 492.719958
KPW 1057.060817
KRW 1732.409297
KWD 0.360233
KYD 0.979084
KZT 612.71658
LAK 25463.81945
LBP 105179.197597
LKR 363.02155
LRD 207.92129
LSL 19.826521
LTL 3.468083
LVL 0.710462
LYD 6.366402
MAD 10.795403
MDL 19.860192
MGA 5297.132504
MKD 61.543973
MMK 2466.385496
MNT 4167.553805
MOP 9.420668
MRU 46.676283
MUR 53.915339
MVR 18.092159
MWK 2039.576425
MXN 21.158465
MYR 4.812408
MZN 75.064681
NAD 19.826516
NGN 1706.088063
NIO 43.193401
NOK 11.906572
NPR 169.991784
NZD 2.023657
OMR 0.449616
PAB 1.174841
PEN 4.232665
PGK 5.002564
PHP 69.43241
PKR 329.132826
PLN 4.225315
PYG 7891.414466
QAR 4.276587
RON 5.092651
RSD 117.424033
RUB 93.579038
RWF 1704.243608
SAR 4.407202
SBD 9.603843
SCR 17.568707
SDG 706.484352
SEK 10.887784
SGD 1.517538
SHP 0.881202
SLE 28.335591
SLL 24629.319496
SOS 671.248424
SRD 45.275842
STD 24310.407882
STN 24.958771
SVC 10.279733
SYP 12986.886804
SZL 19.826507
THB 37.021631
TJS 10.796675
TMT 4.122602
TND 3.424975
TOP 2.827988
TRY 50.147872
TTD 7.972529
TWD 36.804032
TZS 2901.090478
UAH 49.639761
UGX 4175.627205
USD 1.17453
UYU 46.104017
UZS 14097.305357
VES 314.116117
VND 30897.196663
VUV 142.580188
WST 3.259869
XAF 657.154562
XAG 0.018954
XAU 0.000273
XCD 3.174228
XCG 2.117359
XDR 0.816516
XOF 655.388352
XPF 119.331742
YER 280.129715
ZAR 19.820676
ZMK 10572.187233
ZMW 27.109403
ZWL 378.198309
París afronta el dilema del aire acondicionado contra el calor
París afronta el dilema del aire acondicionado contra el calor / Foto: Ludovic MARIN - AFP/Archivos

París afronta el dilema del aire acondicionado contra el calor

A medida que se intensifican las olas de calor, muchos parisinos están empezando a aceptar la idea de instalar aire acondicionado, pese a la tradicional resistencia a este sistema de climatización común en otras capitales.

Tamaño del texto:

Los edificios modernos de oficinas y los grandes almacenes de la capital francesa ya lo usan, pero el aire acondicionado nunca ha sido la norma en los hogares, al considerarse poco ecológico, ineficiente y en gran parte innecesario.

Las quejas de visitantes extranjeros desconcertados por el rechazo de los parisinos al aire acondicionado generalmente han sido recibidas con un encogimiento de hombros típicamente francés.

Pero las intensas olas de calor en los últimos años, que los expertos achacan al calentamiento del planeta, están haciendo que las resistencias se debiliten y los ciudadanos instalen este sistema, aunque con culpa.

"Incluso cuando sabes que es un placer egoísta, llega un punto de inflexión en el que todos los contraargumentos son descartados", asegura Ruben Arnold, un padre de 47 años con niños pequeños.

Como jefe de una empresa emergente especializada en el uso de energía en edificios, Arnold reconoce que era muy consciente de su costo climático, pero necesitaba instalarlo para que él y sus hijos "sobrevivan" al calor.

- Impensable -

Para las personas que viven directamente bajos los típicos techos cubiertos de zinc de los edificios parisinos, los veranos calurosos pueden sentirse como vivir debajo de una sartén hirviendo.

"Durante la última ola de calor, la temperatura subió hasta 41°C en mi casa", explica Marion Lafuste, quien vive en el norte de París bajo estos famosos techos. "No pensé que eso fuera siquiera posible".

Bloques de hielo colocados frente a los ventiladores y persianas cerradas brindan un escaso alivio a esta mujer de 40 años, quien puede refugiarse en el campo junto a su familia cuando hace mucho calor.

De lo contrario, Lafuste confiesa que habría comprado un aire acondicionado pese a todos los "problemas ideológicos" que le plantea, aunque "ya no juzg[a] a las personas que lo instalan".

Martine Bontemps, quien también vive en un ático, asegura que a veces el calor le parece sofocante, pero que no se rinde. Por ahora, se las arregla con un ventilador de techo que logró que su casero instalara.

En plena segunda ola de calor en Francia, el servicio meteorológico Météo-France decretó la alerta amarilla en París, donde las temperaturas podrían alcanzar el martes y el miércoles los 36ºC.

Pero este servicio advierte que la capital podría experimentar olas de calor de hasta 50°C para 2050 y que las noches tropicales, con temperaturas superiores a 20ºC, podrían aumentar.

Durante una fuerte ola de calor en Francia en 2003, un tercio de las muertes de personas mayores vinculadas a este episodio ocurrieron en casa. Por eso, Sophie Julini, de 53 años, instaló aire acondicionado para permitir a su madre de 86 refrescarse.

- "Muy problemático" -

Este sistema de climatización aún no es común en París "pero está en pleno desarrollo", según un estudio reciente de la agencia de planificación urbana APUR, en parte por la presión de los visitantes extranjeros.

Aunque las cifras concretas son difíciles de obtener, "hemos observado una fuerte tendencia" hacia su instalación, indica Karine Bidart, directora de la Agencia Parisina del Clima (APC), para quien esto es "muy problemático".

"Varios estudios predicen que un aumento masivo en el aire acondicionado privado elevará la temperatura exterior en 2°C", abunda Dan Lert, concejal encargado del plan climático de la ciudad.

Para Frédéric Delhommeau, de la APC, "una cosa es usarlo como último recurso, especialmente para personas vulnerables", pero es "problemático" recurrir a él como "reflejo", "porque hay otras soluciones más baratas y eficientes".

Entre ellas está la renovación de edificios, incluyendo cambios en los techos de zinc, pero, a menudo, las agencias de protección del patrimonio las bloquean, indica Lert.

Para la investigadora Anne Ruas, París todavía puede evitar el uso del aire acondicionado en los hogares, pero no por mucho tiempo, por lo que aboga por "pensar en soluciones y proponer sistemas menos dañinos", en lugar de "culpabilizar a las personas".

(T.Burkhard--BBZ)